Ruta de la Rambla de Torvizcón
La serenidad de los paisajes naturales de Torvizcón ofrece un refugio tranquilo para los amantes del senderismo y la historia. Los caminos que se despliegan a través de la Ruta de la Rambla nos cuentan historias silenciosas de tiempos pasados, mientras nos conducen a través de escenarios naturales de impresionante belleza.
Cada paso a lo largo de estos senderos es una oportunidad para conectar con la naturaleza, reflexionar sobre la rica historia de la región y disfrutar de momentos de paz en un entorno espectacular. Torvizcón, con su mezcla única de historia y naturaleza, ofrece una experiencia de senderismo que es tanto un deleite visual como un viaje a través del tiempo.
¿Cuáles son los datos de la ruta de la rambla de Torvizcón?
A continuación, desglosamos los datos esenciales de esta travesía para que puedas sumergirte en una aventura inolvidable por estos rincones menos conocidos de la Alpujarra.
Información | Detalles |
---|---|
Distancia | 17,81 km |
Desnivel Positivo | 827 m |
Dificultad Técnica | Moderado |
Desnivel Negativo | 827 m |
Altitud Máxima | 1.340 m |
Altitud Mínima | 658 m |
Tipo de Ruta | Circular |
Distancia Total | 18.242 Km |
Desnivel de Subida Acumulado | 816.54 m |
Desnivel de Bajada Acumulado | 827.94 m |
Altura Máxima | 1339.25 m |
Altura Mínima | 657.68 m |
¿Cómo llegar al inicio de la ruta?
Empezar desde el pueblo es la mejor idea para dejar aparcado el coche y poder ponerte rumbo a esta increíble ruta de senderismo.
¿Cuál es la experiencia de esta ruta de senderismo?
Iniciamos en el núcleo urbano de Torvizcón, ascendiendo por calles empinadas y luego campo a través hasta encontrar la carretera que nos ofreció vistas panorámicas de las laderas alpujarreñas. Atravesamos el centro vinícola de la Alpujarra, llegando a la Venta Chaparro, un mirador natural desde donde se divisan las sierras y el mar.
El descenso hacia Torvizcón nos llevó por un carril que serpentea entre huertas, algunas abandonadas, en un terreno donde la orientación se vuelve un desafío. La rambla de Torvizcón nos guio de vuelta al inicio, concluyendo nuestra travesía por estos parajes solitarios y poco alterados por el tiempo, en la Alpujarra baja y la Contraviesa.
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