Mirador del visillo
El Mirador del Visillo, ubicado en Lanjarón, Granada, es uno de esos rincones que te dejan sin aliento.
No solo ofrece unas vistas panorámicas impresionantes de la Alpujarra Granadina, sino que también alberga uno de los columpios más fotogénicos de toda Andalucía: el columpio de Lanjarón.
¿Cómo llegar al Mirador del Visillo en Lanjarón?
La ruta hacia el Mirador del Visillo comienza en la carretera de Órgiva. Si prefieres no caminar mucho, especialmente si vas acompañado de niños pequeños, es posible acceder en coche por esta carretera que se origina desde el propio mirador y se extiende a través de plantaciones de olivos.
Se recomienda aparcar en el punto donde la carretera se conecta con un camino de tierra y, desde allí, caminar unos 500 metros por un sendero suave hasta llegar al ansiado columpio.
Una experiencia única
Visitar el Mirador del Visillo es mucho más que disfrutar de un paisaje. Es una experiencia que combina la belleza natural de la Alpujarra con la emoción de balancearse en un columpio suspendido en el aire, con el mundo a tus pies.
Además, el camino que lleva al mirador, conocido como "Camino del Pescao", es una ruta sencilla y agradable que puede ser disfrutada por personas de todas las edades.
Recomendaciones
Si decides visitar este rincón mágico de Lanjarón, no olvides tu cámara o móvil, y prepárate para capturar momentos inolvidables. Ya sea que te balancees en el columpio o simplemente te sientes a contemplar el paisaje, el Mirador del Visillo te promete recuerdos que durarán toda la vida.
Historia del Mirador de Lanjarón más famoso
El nombre "Visillo" proviene del árabe y significa "ventana", aludiendo a la panorámica que ofrece. Históricamente, este mirador ha sido un punto estratégico para las tribus bereberes y, más tarde, durante la época árabe.
Con el tiempo, su valor defensivo dio paso a su aprecio turístico, siendo el "Columpio de Lanjarón" un añadido reciente que realza su atractivo.
¿Mejor época del año para visitarlo?
El Mirador del Visillo es encantador durante todo el año, pero la primavera y el otoño son ideales por sus temperaturas agradables y paisajes coloridos.
En verano, es recomendable evitar las horas de más calor, mientras que en invierno, es esencial ir bien abrigado.